
En este caso, las más cercanas y abundantes que me encontré por Peñes fueron las de la subespecie iberiae (las nuestras).

La más fotogénica, esta hembra, posó como una profesional.

Criarán aquí durante la primavera-verano.

La pareja, el macho, me echó una maldición y consiguió desintonizarme el autofoco, así de borroso salió.

A escasos metros, 2 ejemplares de la raza centroeuropea, flava.

Se ven en paso muchos ejemplares, camino del Norte.
Aquí, pasando detrás de una thunbergi.