Mostrando entradas con la etiqueta cuchara europeo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta cuchara europeo. Mostrar todas las entradas

sábado, 9 de mayo de 2020

Resumen invernal del Parque Isabel: Poco hubo.

Un invierno flojo más, pocos invernantes...la tónica del último lustro. Incluso los habituales, por ejemplo, el porrón europeo (Aythya ferina), no vi ningún día más de 10 ejemplares.








Pocos machos además. Esta hembra salió al césped, algo poco habitual.












De porrones moñudos (Aythya fuligula), todavía peor, solo vi a este macho este invierno.













Los cucharas europeos (Anas clypeata), alrededor de una docena.









Siguió el ánade rabudo macho (Anas acuta) silvestre algunas semanas acompañando a sus compañeros provenientes de granja.











Aunque el número de gaviotas patiamarillas era elevado a diario, muy pocas gaviotas, incluso, reidoras, aparte de las patis. Esta gaviota argéntea (Larus argentatus) se dejó ver bastante. Aparentemente, un segundo invierno.









De pajarinos, mucha variedad, y muy mansos, como pudo comprobar mi sobrino con este carbonero común (Parus major). Por el interés te quiero Andrés, en cuanto enseñas la comida, se convierte en tu mejor amigo.








Muy habituales también las concentraciones de mitos (Aegithalos caudatus).












Y los pinzones vulgares (Fringilla coelebs), también invernantes numerosos en el parque.










Afortunadamente, aquí los chillidos de los martines pescadores (Alcedo atthis) son un sonido clásico del invierno.











Antes del confinamiento, parecía que se preparaban ya los nidos de la colonia de garcilla bueyera (Bubulcus ibis).













Los invernantes fueron muy numerosos, con más de 600 ejemplares.






Y llegó el virus de marras, ¡y todos para casa!
Mucho se debieron aburrir las ardillas rojas (Sciurus vulgaris) sin transeuntes a los que merodear en busca de comida fácil.

sábado, 18 de abril de 2020

Santoña en carnaval (II): Marismas de Bengoa, ibis sagrado, focha común leucística, espátulas y demás.

Al día siguiente comenzamos caminando desde las conserveras de anchoa en dirección al observatorio de las marismas de Bengoa, con límite en la carretera que cruza antes de llegar a la playa de Berria. Al estar en marea baja, un espacio amplísimo lleno de sorpresas.








Ya a la salida, una gran sorpresa con la aparición de una focha común (Fulica atra) leucística.













Salvo por un manojo de plumas del ala derecha, era blanca al completo.











Muy diferente, desde luego, del resto de compañeras, con el color habitual.










Encontramos los habituales grupos de ánades rabudos (Anas acuta).












Numerosos ánades azulones (Anas plathyrynchos), frisos (Anas strepera) y cercetas comunes (Anas crecca).






Menos numerosos, y más dispersos, los cucharas europeos (Anas clypeata)...












...y los porrones europeos (Aythya ferina).















En las pequeñas lagunas, algún somormujo lavanco (Podiceps cristatus).













Y varios zampullines chicos (Tachybaptus ruficollis).













Las superficies emergidas en marea baja son un imán para las limícolas.












Muchos archibebes comunes (Tringa totanus)...











...y zarapitos reales (Numenius arquata).














También individuos aislados de zarapito trinador (Numenius phaeopus).











Una vez en el mirador-observatorio, optamos por seguir caminando por el dique de las marismas.




Desde allí aumentaba mucho la presencia de árboles de ribera, lo que facilitaba el escondite de las zancudas, la más interesante el ibis sagrado (Threskiornis aethiopicus).
Esta especie, que lleva unos años con ejemplares dispersos por todo el Cantábrico provenientes de la población asilvestrada en el oeste de Francia, es desde luego muy llamativa, y cuando la vimos estaba dando buena cuenta de una anguila.





Además, algunas garzas reales (Ardea cinerea).














Y media docena de espátulas (Platalea leucorodia).












En los árboles, los primeros reclamos de las paseriformes, como el pinzón vulgar (Fringilla coelebs).












Como habitualmente, un paseo muy productivo.

domingo, 12 de abril de 2020

Resumen otoñal del Parque Isabel: poco pero interesante.

El otoño pasado tampoco fue muy bueno para las aves silvestres en este parque, y el problema es que cuando pasa esto, llega un momento en el que te centras en otros lugares y dejas de visitarlo.










La única nota positiva, la vuelta de los porrones moñudos (Aythya fuligula), aunque nunca vi más de 3 ejemplares juntos.












Otros porrones, los europeos (Aythya ferina), tampoco pasaron de la docena, algo es algo.







Muchas más hembras que machos.
















Los cucharas europeos (Anas clypeata), bastante bien de número, hubo días en el otoño en los que vi 16 ejemplares.








De ánades rabudos (Anas acuta), aunque hay varios ejemplares domésticos todo el año, el personal del parque, me comentó que al menos uno era de procedencia salvaje.











Floja y vacía, por tanto, la lámina de agua casi todo el tiempo, pero en este parque siempre hay algo que ver, o algún ave que da la nota, como este cormorán grande (Phalacrocorax carbo) tan poco tímido.

domingo, 31 de marzo de 2019

Humedales que prosperan y otros que se mueren

Como en la vida, empecemos por las malas noticias: el Humedal de Alfredo Noval, en Gijón, se muere. Ya estaba en estado crítico, pero este invierno de escasa precipitación, ha terminado de colmatar, y ni siquiera ya se puede denominar humedal. Este es su lamentable estado.










Si lo comparamos con su estado original, el de esta foto, cuando los aficionados a la ornitología simplemente alucinábamos con todo lo que allí veíamos, la sensación de tristeza es muy grande. Desde que la riada de 2010 (que este modesto humedal contribuyó a que no arrasase Gijón, como sí sucedió en otras partes de Asturias) llenó el humedal de sedimentos, no se ha hecho nada para atajar el problema, y ahora es una aliseda más que un humedal.






Esta aliseda puede ser buena para otro tipo de aves, como esta hembra de pico picapinos (Dendrocopos major) captada a unos metros del lugar  pero dudo que vuelvan las aves acuáticas.










Ahora las buenas noticias: la Charca del Pueblo de Asturias sí que está captando buenas cantidades de avifauna, especialmente en invierno.















Salvo en verano, no es un lugar muy visitado por el público, y ha conservado bien su lámina de agua y diversificado su vegetación, por lo que pude ver este invierno buenos números de anátidas, especialmente interesantes los cucharas europeos (Anas clypeata).



Además de cucharas, también varias decenas de ánades azulones (Anas platyrynchos), fochas comunes o gallinetas comunes (Gallinula chloropus).









Lo dicho: no sobran humedales en Asturias, y es triste que se pierdan algunos. Queda el consuelo del mantenimiento de otros, pero sin duda deberíamos cuidar más de estos elementos tan importantes para la avifauna.

domingo, 17 de marzo de 2019

Patos de invierno por Gijón (II).

Sigo con cercetas comunes (Anas crecca). No muchas, pero algunas se dejaron ver por el Piles y el Parque Isabel.










No es un visitante frecuente del parque, pero este invierno hubo casi siempre algún ejemplar.











Este de aquí en concreto estaba sopa.













De cucharas europeos (Anas clypeata) decir que fueron, salvo los ánades azulones, los patos más abundantes.











Hasta 20 llegué a ver, se llevan muy bien con los ánades azulones (Anas platyrynchos).








En todas las mudas posibles.














Machos y hembras.













Son unos patos bien guapos.












De porrones europeos (Aythya ferina), otro invierno decepcionante. Lo más que llegué a ver fueron 7 ejemplares.










Aproximadamente igual número de machos...













...que de hembras.











Finalizo con el porrón moñudo (Aythya fuligula).












Digo "el" porque fue el único ejemplar que vi en Gijón en todo el invierno, ya es triste, teniendo en cuenta que hace menos de una década se veían por decenas.