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martes, 29 de diciembre de 2020

Algunas citas de otoño por Bañugues

 Los otoños por Bañugues suelen ser bastante entretenidas, aunque mi impresión es que la época dorada del paso postnupcial, con cientos de limícolas, ya pasó a mejor vida. Lástima.







Que yo haya visto, hubo algún grupete majo de agujas colipintas (Limosa lapponica).

Pude ver un único ejemplar de chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus).






Mucho más abundantes los chorlitejos grandes (Charadrius hiaticula).

Algún ejemplar aislado de correlimos gordo (Calidris canutus).







Con bastantes más correlimos comunes (Calidris alpina), detrás de nuestro gordo en la foto.

No faltaron los correlimos tridáctilos (Calidris alba).












Tampoco dejaron de acudir a su cita anual los vuelvepiedras (Arenaria interpres).
Los martines pescadores (Alcedo atthis) acuden siempre a pasar el invierno.















Las collalbas grises (Oenanthe oenanthe) de paso otoñal camino de África.
Mismo afán migrador el de la mariposa atalanta (Vanessa atalanta).














En general, me dio la impresión de ser un paso otoñal pobre, en fin, el invierno está entrando fuerte y lo estamos pasando pipa los amantes de los temporales, como aperitivo, a principios de diciembre cayó una posible gaviota híbrida de gavión atlántico x gaviota argéntea (Larus hyperboreus x argenteus).

miércoles, 8 de julio de 2020

Los últimos del prenupcial

Estos correlimos tridáctilos (Calidris alba) fueron los últimos que pude ver en el Rinconín de Gijón, a principios de junio.













Y casi podría decirse que fueron los primeros y los últimos. Esperemos que el año que viene podamos disfrutar mejor y de manera menos accidentada del paso prenupcial.

viernes, 24 de abril de 2020

Santoña en carnaval (y V): Colindres, festival de la limícola

Y terminamos con los bichos (el viaje prosiguió pero en otros términos) con el fondo de la Bahía de Santoña, en Colindres, fue una maravilla, con cientos de limícolas.













Primero fuimos a buscar a los gorriones molineros (Passer montanus) de las instalaciones deportivas, nunca fallan.


















En la zona de los embarcaderos, una sorpresa en forma de cisnes vulgares (Cygnus olor).








Media docena, había.











Muchos silbones europeos (Anas penelope), como es habitual en esta zona.












Tres tarros blancos (Tadorna tadorna), muy lejanos.






Un cormorán grande (Phalacrocorax carbo) sesteando.












También ánades rabudos (Anas acuta).






Un precioso paisaje al fondo.


















La cercanía humana no parecía molestar demasiado a las espátulas (Platalea leucorodia) y a las garzas reales (Ardea cinerea).









La garceta grande (Ardea alba) sí se mantenía muy lejana.












Todo fue a mejor cuando apareció en un lance de caza el aguilucho lagunero (Circus aeroginosus).











Las aves se refugiaron en la orilla, justo donde estábamos nosotros, a unos pasos: andarríos chicos (Actitis hypoleucos)...











...archibebes claros (Tringa nebularia)...












...zarapitos trinadores (Numenius phaeopus)...













...ostreros (Haematopus ostralegus)...












...chorlitos grises (Pluvialis squatarola)...













...zarapitos reales (Numenius arquata)...










...vuelvepiedras (Arenaria interpres)...










...y lo más destacado, cientos y cientos de correlimos comunes (Calidris alpina)...











...entre los que se mezclaban un par de ejemplares de correlimos tridáctilo (Calidris alba).










Mejor imposible para finalizar la jornada de prismáticos.

jueves, 31 de mayo de 2018

Correlimos tridáctilos en paso por el Rinconín

No fue un paso espectacular, pero de nuevo congregaron las miradas de todos los paseantes de la Bahía de Gijón.











A toda velocidad, como se ve en este vídeo, tan difícil seguirlos como que pasen desapercibidos.














Al estar en plena muda durante el paso, los hay de todos los colores, desde el blanco invernal al casi casi leonado nupcial. Los más abundantes son los mixtos, con un plumaje de lo más mezclado.










Para comer, lo mismo que para desplazarse, hay que estar muy atentos porque lo hacen a toda velocidad.













Además de los muy abundantes tridáctilos, pasaron otras limícolas en menor número por el Rinconín, como correlimos comunes (Calidris alpina)...












...chorlitejos grandes (Charadrius hiaticula)...














...vuelvepiedras (Arenaria interpres), con un simpático antifaz nupcial...












...y algunos de los últimos zarapitos trinadores (Numenius phaeopus) de la temporada.


lunes, 26 de junio de 2017

Un paso de limícolas decepcionante (VI): Correlimos tridáctilo.

De nuevo, aunque pude ver varias docenas de ejemplares de correlimos tridáctilo (Calidris alba) tanto en Zeluán como el Rinconín, comparado con otros años se queda muy corto.










Es triste ver que un ave tan abundante en paso otros años, éste se ha visto menos, aunque siempre con cifras superiores a muchos otros limícolas todavía más escasos.







Una pena porque estos limícolas tan activos son muy entretenidos y siempre dan juego.













Además, dan un colorido espectáculo, ya que mudan a diferente velocidad y se encuentran ejemplares muy cambiantes en cuanto a su plumaje.










Pero eso sí, no paran ni un minuto.

jueves, 12 de mayo de 2016

Paraje Natural de la Desembocadura del Guadalhorce (I)

Aprovechamos la visita a Málaga para pajarear un poco por la desembocadura del Guadalhorce, un paisaje muy accesible desde Málaga gracias a la red de transporte público, que te deja en la urbanización Guadalmar en un periquete, así da gusto.









Solamente hay que cruzar un puente y ya estamos en el islote que realmente es este paraje, 67 hectáreas de terrenos que primero fueron marismas, después un terreno reventado por las extracciones de áridos (ilegales) y un vertedero, y finalmente, tras la recolonización natural de las lagunas dejadas en los boquetes que dejó "la civilización", un espacio natural protegido. Cosas de la vida.













Justo debajo del puente, una colonia muy grande de avión común (Delichon urbicum).










Aunque eran más frecuentes estos aviones (el aeropuerto está al lado).












El paseo completo, visitando todos los observatorios, se hace en un par de horas, el lugar es pequeño aunque está muy bien diseñado para tener varios ambientes diferentes.










En una primera zona muy humanizada aparecen especies vegetales naturalizadas, como palmeras datileras (Phoenix dactylifera), la delicia de los estorninos negros (Sturnus unicolor).











Un montón de plantas del púrpura y venenoso ricino (Ricinus communis).











Y mucho carrizo (Phragmites australis), la delicia de muchos pájaros.











Amén de muchos otros, yo pillé a la curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala)...














...o al jilguero (Carduelis carduelis).














Pero enseguida llegamos a las zonas más interesantes, las lagunas.












Ya en el primer observatorio, un buen bando de martinetes (Nycticorax nycticorax) nos sobrevoló, tanto a la ida como a la vuelta.










Nunca había visto tantos en vuelo.













Las lagunas, aunque pequeñas, tenían mucha vida, la más abundante, cigüeñuelas (Himantopus himantopus), había varias decenas y algún pollo, y eso que era una fecha muy temprana.







Muy cercanas.














Y siempre muy ruidosas y nerviosas en sus movimientos.











Abundantes también, pero mucho más discretas, las avocetas (Recurvirostra avossetta).













En las orillas de las lagunas, llenas de vegetación halófila, no mucha cantidad, pero sí variedad de limícolas, entre ellas las 3 especies más habituales de chorlitejos, empezando por el chorlitejo grande (Charadrius hiaticula)...





...acompañado de varios correlimos tridáctilos (Calidris alba).

Ambos de paso al Norte.











Varios ejemplares de chorlitejo chico (Charadrius dubius), desconozco si residentes.












Y los más interesantes chorlitejos patinegros (Charadrius alexandrinus), que sí que se reproducen aquí, aunque pude comprobar que por desgracia las vallas que delimitan su exigua franja de arena han sido arrancadas parcialmente, hay perros sueltos, basura, pescadores, en fin, lo de siempre...termino con este derecho a pataleo y en la próxima entrada seguimos contando qué otras cosas interesantísimas me encontré.