El acentor común (Prunella modularis) no es escaso en Gijón, pero al ser bastante discreto, vivir entre los arbustos, y tener una coloración tan tenue, pasa desapercibido, y seguramente se infracensa.
Es en primavera, cuando se sube a lo alto de las ramitas y emite su también tenue, pero muy agradable canto, cuando es más fácil detectarlo, aunque en todo caso, creo que es el ave más soso de plumaje que conozco, y no suele llamar la atención.
Lo detecté fácilmente en la senda costera de Gijón, a la altura de la playa de Serín, en el Parque de la Providencia, y, sobre todo, en la Campa Torres, donde había una concentración espectacular de estas aves.
Algo tendría que ver la explosión de insectos que había en aquellos momentos, que atrajo a decenas de avecillas y hasta a las gaviotas y las cornejas negras de las colonias cercanas, atiborrándose de los insectos que literalmente brotaban del suelo.
Si ampliáis las fotos, veréis cientos de puntos, son insectos (no, no tengo tan sucio el objetivo...)
Aunque este insecto igual era un poco grande para el acentor que se asustó un poco ante semejante bocado...
Un ave tímida que hay que aprovechar para conocer en estas fechas, luego se retiran a su tranquilo y discreto mundo.
De cerca y con buena luz no es tan soso, tiene unos matices guapos, un ojo llamativo... y sobre todo, presta cuando lo ves y lo identificas. Un saludo
ResponderEliminarPues en la campiña de Santander no se que pasará, porque a diferencia de la campiña gallega y asturiana no tenemos al acentor como ave reproductora. Por el resto son muy parecidas e igualmente interesantes, la campiña costera bien merece ser protegida.
ResponderEliminarSalu2