lunes, 11 de enero de 2021

Una mañana bien aprovechada en la ría del Eo

 Me acerqué a principios de diciembre a la desembocadura del Eo a ver qué se movía por allí, y como siempre, fue una mañana muy interesante. 

Desde el observatorio de Salías, un guapo colimbo grande (Gavia immer), pasó bien cerca.









Aparte del colimbo, lo más llamativo fue una concentración de varias decenas de espátulas (Platalea leucorodia) y garzas reales (Ardea cinerea).

Por desgracia ninguna de las veintipico espátulas estaba anillada.








Desde Castropol, poca cosa. Otro colimbo grande lejano, cercano a un zampullín cuellinegro...

...y una veintena de negrones comunes (Melanitta nigra) bien adentro de la ría, casi en Ribadeo.






En la Linera, multitud de patos, lo más interesante, un macho de porrón moñudo (Aythya fuligula). Acompañado de casi un centenar de ánades azulones (Anas platyrynchos).

Bastante más de un centenar de silbones europeos (Mareca penelope).







Algunos ánades frisos (Mareca strepera).

Y un curioso pato criollo (Cairina moschata), el del dorso verde tan llamativo que está de espaldas en la foto.

Lo dicho, una mañana muy entretenida pese al temporal y al viento.

jueves, 7 de enero de 2021

Somormujo cuellirrojo por Luanco

 Tuve la suerte de comenzar las navidades con un somormujo cuellirrojo (Podiceps grisegena) en el puerto de Luanco.










El mismo temporal que comenzaba aquellos días, y que nos trajo muchas alegrías pajareras, no invitaba a salir de casa, con un amanecer espantoso de frío, lluvia y viento.

Pero estos somormujos, últimamente tan raros, solo acuden a nuestros puertos a refugiarse en caso de esta climatología adversa, así que había que aprovechar.








Ya hacía más de 4 años que había visto el último ejemplar, en Santoña, fue una gran alegría leer el día anterior en las redes sociales esta llegada.

Como casi siempre, al ser el más madrugador, también obtuve las peores fotos, pero disfrutamos un buen rato la familia de este buceador que tan poco se prodiga por Asturias, no siempre fue así.


martes, 5 de enero de 2021

Peñes antes del frío

 Por su posición tan septentrional, y en forma de cuña, la entrada de cualquier temporal en el Cabu Peñes siempre es un espectáculo y una primicia.

Antes de que llegase el frío, y al amanecer, hubo un par de días de viento sur en el que el "peinado" de las nubes creó paisajes espectaculares, con ellos hago esta entrada.






domingo, 3 de enero de 2021

Algunas citas de otoño por San Lorenzo y el Rinconín

 El paseo que va desde el Puente'l Piles hasta el Rinconín de Gijón otorga al observador otoñal la oportunidad de ver muchas aves interesantes. Ya desde el principio del otoño, y más cuando se tuerce la climatología podemos ver bastantes limícolas, lo más llamativo que vi fue a esta aguja colipinta (Limosa lapponica) que se movía por los praos de los jardines alrededor sacando lombrices de tierra con una eficacia pasmosa.









No sé quién aprendía de quién, pero a los vuelvepiedras (Arenaria interpres) cada vez los veo más haciendo lo mismo, y menos en su habitat natural del pedreru.









Cuando se reunen en los praos pueden juntarse hasta 50, lo que puede parecer una cifra elevada, pero es muy inferior a lo que era la norma hace menos de una década.









Como digo, en su hábitat natural sería lo más propio encontrarlos...

...pero es mucho más fácil verlos ejercer de aves urbanas, por ejemplo, peleándose con los gorriones comunes (Passer domesticus) por la comida que le sirve nuestra especie.












Otros limícolas en paso otoñal que yo viese fueron los chorlitejos grandes (Charadrius hiaticula), de manera continua pero en escaso número.
O los chorlitos grises (Pluvialis squatarola), que no suelen quedarse más que unos días.













Misma estrategia que el correlimos gordo (Calidris canutus).
Si alguien se pregunta por la razón de este nombre solo hay que compararlo, por ejemplo, con el pequeño correlimos oscuro (Calidris maritima).














El oscuro sí que se queda a pasar el invierno, en un número cada vez más preocupantemente bajo.














Avanzado el otoño, y llegado casi el invierno, llega el gran contingente de gaviotas invernantes, con ejemplares anillados y otros muy interesantes, como las gaviotas argénteas (Larus argentatus), aquí acompañadas de unas gaviotas cabecinegras (Larus melanocephalus).











Aunque nunca vi más de 3 a la vez, es muy frecuente la aparición de gaviones atlánticos (Larus marinus).
Igualmente escasas pero muy presentes, las gaviotas canas (Larus canus).



















Los cormoranes, tanto grandes como moñudos (Phalacrocorax carbo / aristotelis), siempre en los exteriores del Rinconín.
Finalizo con 2 paseriformes muy vinculados al Rinconín en el otoño y el invierno, uno es el martín pescador (Alcedo atthis), pescando en las charcas intermareales.















Y finalizo con la lavandera blanca enlutada (Motacilla alba yarrellii), que llegada desde Inglaterra comerá en las delicias que le deja el Piles en sus orillas al desembocar en la playa de San Lorenzo.