miércoles, 22 de octubre de 2014

Malditos bastardos

Saco a colación la magnífica película de Tarantino a propósito del cetia ruiseñor (Cettia cetti), vamos el ruiseñor bastardo de toda la vida.











Se oyen mucho, cada vez más, porque yo diría que al menos en Asturias están en expansión, pero se ven muy poco, por sus costumbres vitales, íntimamente ligados a los arbustos más enmarañados.










Y si se ven mal, se fotografían normalmente aún peor, ya que es casi imposible pillarlos en la espesura.












Por eso me dio tanta rabia pillar a este ejemplar, que apareció de improviso en el lugar habitual donde se le escucha en el Parque Isabel de Gijón.





Se puso a reclamar despreocupadamente a un par de metros de mi posición, desde lo alto de una papelera, cosa extrañísima.












El único problema es que eran poco más de las 8 de la mañana, y era aún de noche...no había luz.












Incluso subiendo el ISO a 1600, con el estabilizador puesto, apoyando el culo contra la valla, y el diafragma al máximo abierto, no hubo manera de sacarle las fotos que en otras circunstancias hubiesen sido de escándalo...¡maldito bastardo!

2 comentarios:

  1. Ivan, yo cada día estoy más convencido que éstos "lo saben", reconocen al que se les acerca con una cámara y hacen esto para vacilarnos y pasar ellos un buen rato riéndose de uno, je.
    Sí que da cierto resquemor cuando pasa algo asi, pero el que la sigue la consigue, y algún día saltará la liebre y se dejará hacer la foto. Un saludo.

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  2. Con lo majos y fotogénicos que son... los muy bastardos. Estupendas para las condiciones que había. Saludos

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