jueves, 8 de octubre de 2015

Vacaciones 2015: San Pedro del Pinatar (Salinas)

Al Norte del Mar Menor, afortunadamente lejos de aberraciones urbanísticas, aunque sorprendentemente en una zona intensamente humanizada, las Salinas de San Pedro del Pinatar albergaba a finales de julio toda una variedad de aves nidificantes, algunas de ellas nunca las había visto tan de cerca, teniendo en cuenta que entre ellas y yo había una carretera transitada, la sensación era extraña.







En esta entrada describo lo que vi desde la carretera que bordea las grandes salinas.
En la próxima entrada, describo la senda marcada en azul en el mapa.









Varias decenas de flamencos comunes (Phoenicopterus roseus) llamaban poderosísimamente la atención, éramos varios los coches parados en la cuneta para admirar la belleza cromática de estas aves.









Cruzaban de una salina a otra ajenas al ajetreo humano.













Aunque algún flamenco ya sabe lo que es estar en contacto con un humano, como este anillado en Andalucía.














Un espectáculo para la vista.













Con el mismo morfotipo general, pero muy diferentes al detalle, las cigüeñuelas (Himantopus himantopus) también prosperan en estas aguas salobres.








Acompañadas de chorlitejos patinegros (Charadrius alexandrinus) y chicos (Charadrius dubius), estos últimos en menor cantidad y más lejanos.










Un poco chifladas defendiendo sus nidos, las verjas que cercaban las salinas defendían eficazmente sus posiciones, y permitían a la vez una cercanía inusitada al observador.






Más pausadas, menos zancudas e igualmente coloniales en estas salinas, las avocetas (Recurvirostra avosetta) parecían menos agobiadas con la crianza.









Nunca las había visto apenas a un par de decenas de metros de distancia y pude estar un buen rato disfrutando casi a ojo desnudo.
















Lo de que buenas vallas hacen buenos vecinos aquí funciona de maravilla.











Termino con otra colonia, la de los charrancitos (Sternula albifrons), igualmente muy abundantes aquí.











Una vez aparcado el coche, comencé a caminar por una interesante ruta que une la playa con las salinas, y que me mostró mayor variedad (aunque más lejana) de avifauna, lo dejo para una próxima entrada.

1 comentario:

  1. Gran variedad para un entorno humanizado, pocos sitios les quedan ya a los bichos. Un buen sitio para disfrutar. Salud

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