miércoles, 22 de enero de 2014

Por el Rendiello (V): Pixín.

Pues sí, no solo de plumas vive el hombre, y menudo susto me di cuando poco a poco vi asomar su bocaza a este pixín (Lophius piscatorius), en castellano pejesapo, al lado del Rendiello. Un ejemplar que era realmente enorme. Subía y bajaba despacio a cierta distancia, y no me hice una idea completa de si estaba en superficie esperando comerse a algún colimbo, cosa que por lo visto en otras latitudes hacen con despreocupada frecuencia, o si estaba agonizando y subía a superficie a asustar a algún fotógrafo en sus últimos momentos.


Sea como sea era bestial, son peces de fondo que de vez en cuando salen a superficie, pero no es en absoluto frecuente, y es la 1a vez que lo vea "al natural", porque normalmente suelo verlo en el plato, ¡me encanta el pixín!
Tengo que confesar que en una hermosa velada con mi esposa me zampé una pieza de 2 kilogramos en el restaurante del Talasoponiente de Gijón. llevo buscando casi una hora la foto de tan heroico combate por todo el ordenador, pero temo haberla borrado, craso error, pero juro que me lo zampé entero, estaba buenísimo.

4 comentarios:

  1. Que bueno Iván, si lo ven los pescadores de por allí seguro que lo sacan aunque sea macizando con un bocadillo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues estuve a punto de avisar a unos que estaban "pescando" desde el coche, pero recordé que se habían reído de mis pintas empapao y lo siento, chicos, otra vez no os riais del pajarero...

      Eliminar
  2. Creo que quería vengar al pariente que os zampasteis ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Con la cantidad de pixines que me tengo comido, tendría que haber saltado del agua y arrancarme la cabeza de cuajo para estar en paces conmigo...

      Eliminar

Me encantan tus comentarios, y además los necesito, pero para evitar los ataques de orcos, trols y pesadiellos, me veo obligado a moderar. Si formas parte de la buena gente, tu comentario saldrá seguro.