lunes, 1 de abril de 2013

Mi primera gaviota cáspica anillada

El domingo pude ver mi primera gaviota cáspica (Larus cachinnans) anillada. Fue un gran placer lárgamente soñado, y además con un ejemplar de quitar el hipo.














Lo realmente curioso fue cómo se desarrolló el acontecimiento: sabía que César Álvarez Laó había visto una cáspica anillada esta semana pasada, acontecimiento aún mayor, ya que era la 1ª cáspica anillada que se recuperaba en Asturias, así que teniendo en cuenta este dato, di por hecho que la que yo estaba viendo el domingo era la misma de César.





Solo cuando llegué a casa y vi las fotos me di cuenta, lo 1º, que no se parecían físicamente en nada estas 2 gaviotas. Y luego amplié la imagen y vi que la anilla era distinta.
Me hizo mucha ilusión, y no me podía creer que después de tantos años sin ver una sola cáspica anillada en Asturias, se viesen las 2 1as en el plazo de una semana, seguidas.





Y la cosa no acaba aquí: al ver las fichas de los anilladores, otra sorpresa: anilladas el mismo día, en el mismo lugar, misma colonia: Kozielno, en el interior de Polonia, donde la especie está en franca expansión.

Fue vista por las costas gallegas este mismo invierno.
En fin, toda una serie de datos curiosos.



Sea como sea, y aunque no hubiese estado anillada, todo un acontecimiento disfrutar de esta especie de gaviota, que en este ejemplar es un 1er invierno, y presenta, salvo la coloración del pico, que es un poco deforme, todas las señas de la especie, entre otras: cabeza escurrida hacia atrás, en forma de pera, ojo oscuro y muy pequeño, cabeza prácticamente blanca, como el pecho, boa de color grisáceo en nuca, y manto y escapulares con manchas en forma de diamante (acertadamente Antonio Gutiérrez dice que como los logos de Subaru...).








Para acompañar a este equipo de serie, un tamaño descomunal, mucho mayor que el de las patis cantábricas que la rodeaban, y similar al de una gavión pequeño, pero con detalles propios, como unas patas muy largas que le dan una altura muy superior a cualquier otra gaviota que se pueda encontrar en Asturias, y una mala leche considerable que hace que las demás gaviotas, a pesar de su juventud, le tengan mucho respeto.
Bueno, como veis, estoy encantado con esta especie.

6 comentarios:

  1. Fantástico dato sí señor, y más fantástico aún el hecho de haber coincidido dos ejemplares tan seguidos en el mismo lugar. El seguimiento continuado de Zeluán va dando estos frutos. Y siguen multiplicándose las observaciones de cáspica.

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    1. Sí, las casualidades a veces suceden. Las cáspicas, como en el caso de otras gaviotas poco habituales, cada vez se ven más gracias a la labor divulgativa que se está haciendo por parte de los grandes gavioteros del país, que van enseñándonos poco a poco a los interesados a identificarlas.

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  2. Lo que está claro es que estas dos decidieron unir sus destinos.. Enhorabuena, un saldo.

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  3. Ya sabes que no soy muy "gaviotero" pero no por ello no me doy cuenta de la complejidad de la situación y de la observación; así que solamente me queda darte la ehnorabuena!!
    ;)

    un saludo amigo

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    1. Gracias, Juan, yo tampoco era muy gaviotero y ya me ves...

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