lunes, 29 de abril de 2013

La focha indiferente

Las fochas comunes (Fulica atra) del Parque Isabel de Gijón nunca se caracterizaron por su timidez, más bien al contrario, pero en época de reproducción suelen volverse más distantes, y hasta agresivas.
Digo suelen porque en este caso, desde luego no fue así.













Santa pachorra con "paradinha" al borde del camino, no se cortó a la hora de casi hacerme tropezar.












¡Qué bien viven estas fochitas!

sábado, 27 de abril de 2013

Unas gaviotas sombrías anilladas

Os dejo unas gaviotas sombrías (Larus fuscus) anilladas.

Esta B+G es de las de Peter Rock, anillada en Bath, Inglaterra, es un 1er invierno, y va subiendo desde Portugal, donde la localizaron 2 veces. Esta es su 1ª lectura española, y sospecho que a estas alturas ya habrá cruzado el Canal de la Mancha.

Yo la vi el domingo pasado en la Playa de San Lorenzo, Gijón.

Es hembra, tiene carita de serlo.











Esta otra sí que se ha visto más veces, en concreto la vio el amigo Juan Villar Sordo en el mismo sitio que yo, el Parque Isabel de Gijón, me avisó (gracias), y aquí la traigo, es V.N0N, del no siempre activo anillador Tommy Pedersen.
















Es danesa, concretamente de Langli, Blavandshuk, de aquí, en un parque nacional que visto desde el aire tiene una pinta más que estupenda.
Y también es un 1er invierno.








Esta otra es archiconocida, requetevista, es H.0E8, la alemana de 2º invierno con muda atrasada que ya os he sacado más veces, y curiosamente anillada a unos pocos kilómetros de la anterior gaviota, solo que en la orilla alemana, por Sonke Martens.
También vista por varias personas en Gijón, entre ellas también por Xuan.






Por último, una gaviota anillada en metal a la que solo pude sacar una única foto en el Parque Isabel, porque cuando la rodeaba para sacar los guarismos que faltaban, echó a volar. Me quedé sin, al menos, 2 letras y la 1ª cifra, pero con eso y sabiendo que era un 1er invierno, y que la anilla procedía del Museo de Arnhem, Holanda, la mandé.




Otras veces, suficiente para saber qué gaviota es, pero no en este caso, me dijeron los holandeses. Lástima.

viernes, 26 de abril de 2013

Pica pica, y no es una urraca

Vaya si pica. Este sábado, mientras gastaba un par de tarjetas haciéndoles un posado a las 2 gaviotas de Delaware del Parque Isabel, cometí el error de no hacerle caso al arrendajo (Garrulus glandarius) troquelado que habita el Parque Isabel de Gijón.
















Grave error, porque este pájaro pide protagonismo absoluto, y primero se subió a mi zapato, y como seguía a lo mío con las gaviotas, terminó por subirse al banco que había al lado y finalmente se me enganchó a un dedo de la mano. Más rotundo imposible.








La artritis de mis manos hace que cuando hay algo de frío tengo que salir con al menos unos guantes finos, porque de lo contrario me duelen mucho los dedos, y en este caso me salvó la uña de acabar rota por el pico tan potente de este córvido, se quedó la cosa en una anécdota.












El problema es que lo que a mí me resultó inocuo, y si hubiese habido alguien cerca observando, hasta simpático, con un tío intentando frenéticamente y con escaso éxito, quitarse al pajarraco de encima y mantenerlo inútilmente a al menos 1,80 metros para poder enfocarlo con el teleobjetivo, si le pasa a un niño, y no digamos a algún personaje lleno de derechos inalienables, puede acabar con el arrendajo de nuevo en una jaula, o directamente liquidado a bastonazos.

Esta batalla se la ganamos las gaviotas de Delaware y yo al glayu, pero seguro que me espera allí para pegarme otro susto y quien sabe si llevarme una oreja (o algo peor) por los aires. Seguiremos informando.

martes, 23 de abril de 2013

Trigueros y compañía en Moniello

En cuanto salió el Sol junté a unos amigos y nos dirigimos al área recreativa de Moniello, cerca de Luanco.
Me encanta este área porque está enfrente de la mítica Punta la Vaca, se ve pasar a las aves marinas, y debajo tiene la no menos mítica entre los aficionados a la geología playa de Moniello y sus calizas, y el área en sí está muy bien, limpia, amplia, con un restaurante que no desentona demasiado y un paisaje de lujo.

Pero lo mejor de todo es que aquí puedes venir con tu familia y amigos y disfrutar con ellos de un buen día mientras tú disfrutas de la ornitología. Mientras preparas unas chuletas en la barbacoa y medio chispa de buen ron añejo, estás escuchando a los trigueros, a los pardillos comunes, a los buitrones, a las lavanderas boyeras y un largo etcétera, que habitan en las magníficas zonas arbustivas que rodean este lugar, y en cuanto pude escaparme un momento a buscarlos, les saqué unas (malas) fotos.

Los trigueros (Emberiza calandra) abundan aquí, y eso ya es raro hoy en día en la campiña costera.











En estas fechas andan revolucionados y se les escucha a todo pulmón, permitiendo acercamientos que el resto del año son imposibles, son pájaros muy precavidos. Aún así, procuro no abusar de esta circunstancia, ni molestar.









Es mucho más fácil escucharlos que verlos, y a pesar de ello se trata de pájaros grandes y robustos, que se camuflan con facilidad con su plumaje de tonos pardos, pero que se dejan ver cuando cantan siempre en una horquilla prominente de la vegetación.








Y su pico también llama la atención de cerca, con un grosor que destaca entre los escribanos, y un diente intermedio que sale a la luz entre trino y trino.








Además de gorriones comunes, golondrinas comunes, lavanderas boyeras, mirlos comunes, petirrojos, jilgueros, verderones, colirrojos tizones y otros muchos, pude localizar y malfotografiar a otros paseriformes, el más fácil, la tarabilla común (Saxicola torquatus), siempre en lo alto de los arbustos.








Otro que pasa desapercibido por su plumaje es el acentor común (Prunella modularis).













También discreta a la sombra, pero con un reclamo que se asemeja a una buena riña, la hembra de curruca capirotada (Sylvia atricapilla).







Un reclamo aún más monótono y persistente es el que tiene el buitrón (Cisticola juncidis), que emite su áspero pitido desde las alturas y que raramente es pillado en su posadero.










Y recordemos que también es territorio del mayor de los paseriformes, el cuervo (Corvus corax), que se pasó un instante de camino al acantilado donde seguramente esté comenzando su crianza.

domingo, 21 de abril de 2013

Gavión hiperbóreo en la Playa de San Lorenzo: se le echaba de menos

Sí, es que hace años que al impresionante gavión hiperbóreo (Larus hyperboreus) no lo veía por aquí, ahora tiene más querencia por el puerto comercial de Gijón (El Musel), y no es territorio que yo pise nunca, así que llevaba tiempo sin verlo.






Es un ejemplar de 1er invierno, aunque por el desgaste de las plumas más bien diría yo que 1er verano.







Una gaviota enorme normalmente, este ejemplar no parecía tan grande (una hembra quizás).















Esas primarias blancas inmaculadas impactan a distancia, y fue lo 1º que me llamó la atención nada más pisar la playa.









Playa que milagrosamente estaba vacía de gente y perros y llena de gaviotas. Demasiado llena para este o esta grandullón/a, que no tiene mucha paciencia.








Y en cuanto otra gaviota, en este caso una sombría (Larus fuscus) se le ponía cerca y reclamaba...










..a por ella...









...poca paciencia...










...y sobrado de fuerza para expulsar a todos sus vecinos.









No sé yo si se hubiese atrevido, pero una pelea con el gavión atlántico (Larus marinus) del fondo hubiese sido espectacular.









En definitiva, una gaviota que no se olvida y que siempre se echa de menos cuando tardas en volver a verla.

jueves, 18 de abril de 2013

Gaviotas sombrías del verano

Según se acerca el verano el desgaste y desbaste de las plumas de estas aves es espectacular, quedando el raquis más duro intacto, ya deshilachándose el resto de la pluma. Ya están pidiendo un cambio, que llegará en otoño principalmente.

El aspecto de una gaviota sombría (Larus fuscus) 1er veraniega se parece en esta época a este ejemplar, aunque no sea del todo prototípico, con ese pico tan rosa.













Otro modelito de 1er verano "late 1st winter", quizás algo más retrasado.












Y un 2º verano, con unas plumas terciarias extrañamente aún inmaduras.

lunes, 15 de abril de 2013

Algunas fotos sueltas de los bichos que hay por Zeluán


Los habituales de Zeluán seguimos esperando con ansia el gran momento de la migración prenupcial, para la cual ya va quedando menos.

Mientras tanto, nos conformamos con alguna avanzadilla que ya está aquí, más los últimos invernantes, os pongo unas fotos.

Impacta ver las golas de lujo del somormujo lavanco (Podiceps cristatus), está esplendoroso.








Si os fijáis, las garcetas comunes (Egretta garzetta) pasan por un breve periodo en el que los habituales tonos amarillos de las patas se convierten en escarlata. Aunque el tono de la foto es más bien desvaído, se aprecia, así como la brida que les sale del mismo color por delante de los ojos.







Los cormoranes grandes (Phalacrocórax Carbo) siguen pasando, en número cada vez menor.











Hubo una serreta mediana (Mergus serrator), muy difícil de seguir y de fotografiar.









El que se dejó a placer fue el ostrero (Haematopus ostralegus), al que hacía tiempo que no veía por aquí, y que es siempre fuente de gran placer visual, por su escasez y por su diseño del plumaje tan guapo.









Aparecieron los primeros chorlitos grises (Pluvialis squatarola) en migración, todavía no están muy guapos en plumaje de verano.



Los que sí van con buen ritmo son los chorlitejos grandes (Charadrius hiaticula), con un goteo constante de efectivos.















Los correlimos comunes (Calidris alpina) son siempre los más numerosos, y hay mezcla aún de ejemplares de 1er invierno y adultos, y estos no siempre llevan la librea del período reproductor.








Los parientes correlimos tridáctilos (Calidris alba) aún no han hecho más que empezar a llegar, son muy pocos aún.










Otro fijo en la migración, el zarapito trinador (Numenius phaeopus), por ahora hay solo un ejemplar.









Y unos que solo se detienen durante unos minutos la mayoría de las ocasiones: charranes patinegros (Sterna sandvicensis).









El pasod e gaviotas es aún muy escaso, por ejemplo esta gaviota sombría (Larus fuscus), con esas anillas holandesas tibiales tan características (y tan difíciles o como en este caso imposibles de leer).

Lo dicho: ya falta poco para la apoteosis anual.

domingo, 14 de abril de 2013

Glayando al amanecer

El arrendajo (Garrulus glandarius) troquelado del Parque Isabel sigue por allí, y tiene la fea costumbre de pegarte unos sustos de buena mañana con sus glayidos, a corta distancia, mientras te observa seguro desde lo alto.













Hoy que la nena no me dejó dormir ni medio bien, y que me dolía la espalda, iba bastante somnoliento, y me pegó un susto de cuidado mientras me acercaba sigiloso a las gaviotas.











Me hizo gracia, y espero que a él también le gustase la broma, porque eso significaría que es tan inteligente como dicen.











Pero como suele pasar, "la trampa rescampla", y al dar a conocer su localización con su peculiar chillido enseguida acudieron a echarlo los pajarillos del parque, el primero este carbonero común (Parus major), perdón por la foto desenfocada.

Esta situación ya me había ocurrido en algún bosque: él te pilla y te delata, pero en un momento llegan los páridos y le echan la bronca y es él quien acaba a la carrera entre las ramas.